miércoles, 6 de abril de 2011

El Sobrehumano (Pero a veces…) 1989 - A mis 26 años

El Sobrehumano (Pero a veces…)
1989 - A mis 26 años

Soy un viento desaforado
Un huracán de espíritu y de voluntad indomado
Incansable al acecho
Pero a veces…
Solamente una leve brisa
Mientras mi alma intranquila agoniza
Y la vida misma se convierte en una carga insoportable,
Y la muerte. . .


Yo brillo guiado por ese fluido resplandecer
El supremo poder de aquello que profeso
Y sin embargo a veces…
En el silencio y en la oscuridad de la noche,
O del día
Mis oídos se colman de los abucheos
De pavores añejos que renacen
Como enemigos exiliados al reino de los difuntos
Y aquellos asuntos que más temo me desafían de nuevo


Yo camino triunfantemente solo,
Imponente, y dispuesto a expiar por mis acciones:
Sin remordimientos, sin retracciones;
Pero a veces
Como la súbita ola que recubre la vetusta roca
Un dolor llega a mi alma y arranca y desgarra
Mientras siento el agobio de mis años,
De siglos de atrasos,
Y este mundo impío se muestra más allá de la redención
Y mi propia insensata mortalidad ostenta mi atención,
Y no puedo sino suspirar. . . ¿por qué?


Yo me enfrento a mis batallas con destreza impecable,
Armado de mi voluntad infatigable
Y perdiendo,
Nunca reparo dos veces en el fracaso
Un mero ocaso del azar
Pero a veces,
Si acaso por una hora, un segundo o un día,
Una ola, ¡no!, más como un escalofrío
Destraba ante mí la agonía del tiempo,
Del tiempo que he perdido y del tiempo que me falta,
Y quedo abatido por la noción de que mis obras,
¡Mi misma moción!, algún día ya no serán más.


Yo, que he hecho de la Batalla un arte,
Y he dado alas a mi corazón desafiante,
A veces,
Me siento tan solo
Que ningún ser humano puede comprender
Las complejidades de este singular ser que siente
¿Qué siento?


Yo me aventuro valeroso
Ambos león y raposo
Hacia mi destino final, sin dejar camino por atravesar
 ¡Pero alto!
¿A qué costo me he convertido en este cruzado temerario
Invasor solitario de un dominio más allá de lo humano?
 ¿Estará este profeta insano?


Yo, que nunca reparo en las desgracias de la vida
Y que libero a esas pendencias de su amargo paladar  
No pierdo oportunidad de comenzar de nuevo;
Pero a veces,
Por los instantes más breves de tiempo,
Mientras camino por las playas desiertas de mí pensar
Mis fracasos me reaparecen con la marea:
No hay adonde huir; no hay adonde ocultar.


Yo acecho intrépido el ignoto camino
Y examino con desdén, incluso ira,
A aquellos que declaren mi delirio;
Sin embargo a veces,
Mi paso se reduce a un alto
Sin un líder que seguir y me siento extraviado
Mi arresto parado conforme admiro a esta jungla
Que me rodea.


Y sin embargo yo, que me inclino ante el plan eterno
Que dictamina que todo lo nacido
Incluso Dios, hijo del hombre, debe morir
Siempre al final llego a comprender
Que nuestro destino no es entender
Sino sufrir, ¡no!, desafiar
La condición mortal –
Ya que mientras respiramos, es nuestro deber luchar*.

Shodai Sennin J. A. Overton-Guerra

Originalmente en el inglés "to fight" ("luchar") pero en la traducción al castellano lo cambié a "guerrear" y hoy 21 de noviembre, 2011 lo cambio de nuevo a "luchar".



EL CREDO POS-MODERNISTA (circa 2001)

EL CREDO POS-MODERNISTA

Creo que hay una sola Verdad:
Que en el tiempo y en el espacio trazamos un sendero
Del nacimiento a la inevitable nada 
Y que sobre aquel dominio
Ningún dios del hombre nacido tiene predomino para declarar

Creo que el Cielo o el Infierno es otra gente.

Creo que vivir es lidiar
El tenerte que parar sólo para caer de nuevo
A veces para ceder y otras para abogar
Pero siempre para batallar contra ese amargo final.
Y después,
Conforme se presenta el momento terminal
Imprecar o avalar el transcurso de toda una vida.

Creo en la honestidad y en la integridad
Pero en la sabiduría antes del hecho o la verdad
Y que gran parte de la juventud se gasta
En busca de esas distinciones.

Creo que la humanidad está maldecida por inmortales adicciones
Y que ninguna semejante necedad
Creó mayores aflicciones en este mundo.

Creo que los hombres blancos sí pueden saltar.

Creo en la familia
Y en el valor de un verdadero amigo
Y en la lealtad y en la justa retribución
Porque en esa equitativa distribución no hay crimen.

Creo que amigos son aquellos que ganan cuando tú ganas
Y que comparten en tus triunfos y fracasos.

Creo que el ‘espíritu’ es aquel metal forjado
Cuando mente y cuerpo se juntan para desafiar los fuegos de la adversidad

Creo el en carácter y en la presencia
Y que la esencia de un hombre o mujer,
Solamente se encuentran al balancearse al borde del abismo
Y que a través del escaso margen de cada paso errado
Establecemos quienes somos en realidad

Creo que debo evitar antes de herir,
Herir antes de mutilar,
Mutilar antes de ser matado
Pero si soy llevado más allá por el desafío
Entonces matar habré y haré
Para proteger familiar, persona o amistad

Creo que las mayores transgresiones
Han sido cometidas por aquellos armados de doctrinas ficticias
Pronunciadas por seres confabulados
Responsables por hechos fabricados

Creo que el amor es el único paliativo
Contra la afable indiferencia del Universo

Creo que la capacidad de ilusión de la humanidad
Se presta la mayoría del tiempo
A un autoengaño contraproducente
Que enmaraña y atrapa con grilletes impalpables

Creo que contra el vicio de pedir
Está la virtud de no dar.

Creo que puedes huir de la realidad y aun de ti mismo
Pero que sólo te agotarás
Y que muchos quedan enlodados en esa misma fuga

Creo que las acciones que marcan una vida
Deberían pintarse con rasgos intrépidos y recalcados

Creo que la Fe significa no querer saber la verdad.

Creo que el genocidio de una nación
Continúa con la erradicación del pasado ajeno
La deprecación de su presente,
Y la implantación de ídolos extraños
Hechos en imagen y semejanza a sus opresores.

Creo que los animales tienen mentes.

Creo que lo mejor que un hombre puede ser
Es padre a aquellos con necesidad
Y en sus obras de su prójimo hermano

Creo que la paciencia es una virtud
Pero solamente al esperar
Y que en odiar no recompensa

Creo que la Visión es la mejor defensa
Contra las disparidades irremontables de la vida
Y que en su representación es cuando nos convertimos
En los mismismos dioses que hemos creado.

Creo que saber y no hacer es no saber.

Creo que la grandeza nace solamente en la escuela de la guerra vital
Y que la vida, o la muerte,
Son escogencias individuales que cada uno de nosotros tiene el derecho de portar.

Creo que cada uno nace un pedazo de metal o de piedra
O tal vez un bloque de madera
Y que contra las punzadas y tajadas de la vida
Debemos añadir taladas del propio cincel
Y convertirnos en obras de arte.

Creo que la pobreza es el único pecado original.

Creo en el poder de la voluntad
Y en la voluntad al poder
Y que donde hay una voluntad casi siempre hay un camino
Y que el camino de la voluntad junto con la habilidad de la supervivencia
Mantendrá la vigencia de los sueños,
Sueños que vierten una luz sobre la oscuridad de la pesadilla diurna.

Creo que la virtud se encuentra
En aquel inefable y sagrado espacio
Entre el ‘ser’ y el ‘siendo’

Creo en exigir la perfección
Pero en conformarse con la excelencia

Creo que la verdad es un recurso escaso
Y que hay que emplearla con sano juicio

Creo en la crianza por encima de la natura
Y que la sociedad es culpable de negligencia
Cuando condena a los jóvenes de mente
A las celdas de instituciones
En vez de entrenarlas para que hagan sus propias contribuciones
Al conjunto total

Creo que el propósito de una educación
Es de aprender a separar realidad de ficción
En la persecución de las inalienables esencias de la existencia humana

Creo que los amigos se olvidan
Los familiares se mueren, y las posesiones pierden su lustre
Pero que solamente la grandeza conoce la eternidad –
Para aquellos capaces de lograrla

Creo que los días pasan y pierden el brillo de su gloria
Y que al final lo único que queda son los susurros sosegados de nuestra propia historia

Creo que el ser libre es ser concedido la opción de convertirse o simplemente de no ser 

Creo que cada momento debería vivirse
Y ser experimentado como si sus acciones resonaran por una eternidad.

*Creo que la verdadera riqueza en la vida
Y la creativa destreza del arte de filosofar
Sólo surge de la austeridad inspiradora de la pobreza material.

Creo que en la vida la búsqueda de la certeza
Acaba solamente en la muerte
Y que esa es la única Verdad olvidada
Y corrompida por siglos de malas interpretaciones.

*Estrofa añadida a la versión original traducida el 4 de abril del 2010. 

Por Shodai Sennin J. A. Overton-Guerra